Decir vino moscatel es identificar un tipo de vino muy concreto: procede de uvas muy maduras y resulta fino, muy aromático, afrutado y dulce.
Estas características lo convierten en una opción ideal para acompañar postres.
También son buena alternativa para la hora del aperitivo, con dos condiciones: que el moscatel elegido esté muy frío y que no sea excesivamente dulce.
En cuanto a la uva, la moscatel es una variedad asociada al Mediterráneo por eso de necesitar de humedad y calor, razón por la que es uva principal en denominaciones como Málaga y Valencia.
La moscatel de Alejandría es una de las uvas que más pronto se cosecha a causa de las altas temperaturas propias de sus zonas de cultivo.
La moscatel de grano menudo, también de brotación temprana, es de baja productividad y resistente a la sequía.
Produce vinos de alta graduación y acidez, motivo por el que se utiliza en ocasiones para elaborar vinos secos o semi-secos, es decir, no dulces.
En España es una de las variedades cultivadas más antiguas.
En la actualidad las viñas de moscatel se localizan, principalmente, en Andalucía -Málaga y provincia de Cádiz-, Comunidad Valenciana y Navarra.
También tiene presencia en otras regiones en las que se está recuperando.
No obstante, es en Valencia y Málaga donde abunda y es variedad principal en sus respectivas denominaciones de origen.
Entre los tipos de moscateles dentro de nuestras fronteras, destacan los de Málaga, Alicante y Navarra.
Por lo general, son vinos dulces o semidulces monovarietales, conseguidos mediante el encabezado, es decir, se les adiciona alcohol vínico para interrumpir la fermentación.
Y los podemos encontrar sin o con crianza.
También se producen con esta uva los considerados vinos de licor (conocidos como ‘mistelas’ en Valencia) porque salen de la mezcla de vinos o mostos con alcohol.
En la tipología de vinos dulces también está el moscatel jerezano, que consiste en un vino de crianza oxidativa, de un color más oscuro y donde la uva es sometida al tradicional sistema de asoleo que produce una gran concentración de azúcares, cierta coloración y notas de pasificación.
A ello responde que este tipo de vino suela ir etiquetado como “Moscatel de pasas”.
En este caso, como sucede con los demás vinos de uva moscatel, se para la fermentación mediante la adición de alcohol vínico para obtener los 15 grados.
Por último, mencionar que también encontramos en nuestro país vinos secos hechos con esta vinífera, con un perfil muy aromático, afrutados y fáciles de beber.
En este caso la uva moscatel se suele mezclar con otras variedades blancas.