La leche de vaca es reconocida como una fuente importante de calcio, proteínas de alta calidad, vitamina D y otros nutrientes esenciales que son fundamentales para el desarrollo y mantenimiento de los huesos fuertes y la salud en general. La proteína contenida en la leche ayuda en la reconstrucción y reparación del tejido muscular, mientras que el calcio y la vitamina D son cruciales para mantener la densidad ósea, lo que es particularmente importante en adultos mayores para prevenir la osteoporosis. Además, estudios sugieren que el consumo de productos lácteos puede estar asociado con un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares. Las grasas saturadas presentes en la leche han sido motivo de preocupación; Sin embargo, investigaciones recientes indican que en el contexto de una dieta equilibrada, los efectos de estas grasas pueden ser neutrales o incluso beneficiosos para la salud del corazón. Asimismo, la leche de vaca puede jugar un papel en la regulación de la presión arterial y en la reducción del riesgo de diabetes tipo 2. El consumo de leche de vaca en adultos puede ofrecer varios beneficios nutricionales y para la salud, incluyendo el aporte de calcio, proteínas y otros nutrientes esenciales.