Poseen nutrientes energéticos, hidratos de carbono, grasas saludables, vitaminas, proteínas y fibras vegetales que favorecen el sistema inmunitario de nuestro organismo y previenen la aparición de problemas de salud graves. Favorece la reducción de la presión arterial y disminuye el riesgo de que se den problemas cerebrovasculares. La manzana aporta muchos beneficios al organismo. Contienen fibra, potasio, vitamina B, C y K, además de pectina, una fibra prebiótica que mejora la digestión y la salud metabólica. Aporta grandes cantidades de fructosa, glucosa sacarosa y flavonoides, entre las que se encuentran las más importantes: las procianidinas. Este compuesto tiene una potente actividad antioxidante que fomenta la salud cardiovascular y reduce el riesgo de padecer enfermedades como la Diabetes Tipo 2, el Cáncer y el Alzheimer. Consumir con frecuencia piña ayuda a mejorar las funciones digestivas, el funcionamiento del hígado, reduce la presión arterial y es antiinflamatorio. La absorción de hierro refuerza el sistema inmunológico, los huesos y las articulaciones, disminuyendo el colesterol y previniendo la coagulación de la sangre que podrían provocar problemas cardiacos y cerebrovasculares. Los beneficios de esta fruta también se extrapolan a nivel externo del organismo. El consumo de kiwi mejora la piel evitando la formación de arrugas, dado el alto nivel de vitamina C que aporta hace que aumente la producción de colágeno en notre cuerpo y, por consecuente, la elasticidad de la piel también crece. La papaya es un aliado para la salud del tracto digestivo. Su alto contenido de agua y de fibra previene el estreñimiento. Además, aporta al organismo vitamina A, C y E. Enfocado hacia los beneficios que genera en nuestra salud, esta fruta disminuye el riesgo de padecer enfermedades cardiacas, diabetes y cáncer debido a que mejora el control de la glucosa en sangre y reduce la presión arterial.