El Luis Cañas Crianza puede maridar muy bien con una cena clásica de pavo al horno. Este vino tinto de La Rioja, que suele ser un coupage de Tempranillo y otras variedades, tiene suficiente cuerpo y estructura para complementar la textura del pavo, especialmente si está acompañado de salsas o guarniciones robustas.
El Legado Muñoz Tempranillo puede ser una buena opción para maridar este plato navideño, ya que resalta los sabores especiados, tales como el pimentón y los condimentos de este platillo, gracias a su estructura y cuerpo.
Las notas frutales del Tempranillo, junto con sus matices especiados y de roble, pueden complementar los sabores de la carne y las salsas que acompañan al rollo de sobrebarriga, y la acidez moderada del Tempranillo ayuda a equilibrar la grasa de la carne, haciendo que cada bocado sea más agradable y manteniendo el paladar fresco.
El Hacienda López de Haro Tempranillo puede maridar bastante bien con este plato.
Gracias a su cuerpo y estructura, este vino tiene un cuerpo medio que puede complementar la textura de la galantina, una preparación rica que combina carne de cerdo, pollo y otros ingredientes.
El cerdo guisado o Steak Pork es un plato navideño originario de San Andrés y Providencia.
Para este plato, un vino muy recomendado es el Finca Villacreces, ya que, gracias a que tiene un cuerpo medio a completo, proporciona una buena estructura para acompañar la riqueza del cerdo guisado, realzando los sabores del plato sin opacarlos.
Sus notas de frutas rojas y negras, así como sus matices de especias y toques de roble por su crianza en barrica, complementan perfectamente los condimentos y salsas que a menudo se usan en el guiso de cerdo, aportando una armonía en el paladar.