Se trata de uno de los mayores errores de maridaje el pensar de manera automática que la mejor combinación para el pescado o el marisco es siempre el vino blanco. No siempre es así, se debe tener en cuenta el tipo de pescado, la salsa o los ingredientes con los que esta cocinado. En ocasiones, la mejor opción puede ser un rosado o un vino tinto joven. El pulpo es uno de los grandes productos de la gastronomía española. El secreto de este plato, es conseguir la consistencia y la textura perfecta, ni muy blando, ni muy duro. El pulpo y vino forman una pareja perfecta. Los vinos que están a la venta están especialmente indicados para combinar con: Pulpo, Pollo, Cerdo, Vaca, Jamón y Queso. El del pulpo es un blanco fresco y sedoso que encaja con la especial textura de este alimento, da igual el tipo de receta con la que decidas cocinarlo. Para otro tipo de pescados y mariscos los vinos que encajan son estos. La langosta, en elaboraciones sencillas o con salsas a base de mantequilla, va bien con un Chardonnay fermentado en barrica. Las ostras van muy bien con vinos espumosos secos, sin olvidar los excelentes blancos de Galicia. Los crustáceos casan bien con Riesling, Gewürztraminer, Verdejos o blancos de Alella. Aunque el truco infalible para disfrutar de una buena comida y un buen vino, es hacerlo en la mejor compañía.