Romesco es a España lo que el pesto es a Italia.
A veces llamado "pesto español", somos tan grandes admiradores del romesco que, dicho de otra manera, si no estamos haciendo pesto, Almost certainly estamos haciendo romesco.
Si bien los italianos prefieren mantener la receta de su amado pesto dentro de parámetros estrictos, los españoles son mucho más relajados.
Encontrarás que el romesco varía tanto en todo el país que es casi una salsa que se niega a ser encasillada, y lo amamos aún más por eso.
Tu mayor dilema es decidir qué tipo de pimiento usar.
Tanto el romesco como el pesto usan el aceite de oliva y el ajo de clase mundial de sus países, y en el caso del pesto siciliano, también tomates.
Los tradicionalistas argumentan que el verdadero romesco debe hacerse usando pimientos ñora secos y rehidratados (o, como mínimo, pimientos piquillo o choricero).
Fuera de España, sin embargo, donde la disponibilidad de diferentes tipos de pimientos es limitada, los pimientos rojos se han convertido en la norma.
El romesco y el pimentón: otra decisión muy debatida.
El pimentón casi siempre aparece en el romesco, aunque se debate si debe ser de variedad dulce, ahumada o picante.
De cualquier manera, el pimentón le da al romesco una vibración diferente a la del pesto.