Cualquiera que visite Galicia no debe dejar de desgustarlo, en cualquier taberna, restaurante o en uno de los puestos de pulpeiras distribuidas estratégicamente por toda la provincia.
Lo único que tienes que hacer es pedir todas las raciones que quieras.
Para cocinar este plato en casa os recomiendo que lo compréis congelado, así nos evitamos tener que mazarlo y de esta forma no nos saldrá duro como una piedra.
Y si os sobra pulpo podéis preparar también un original pulpo al horno, como lo hacen en Mugardos, a la Mugardesa, a lo Sochantre, confitado, en tempura, acompañando un arroz o risotto o emplear las cabezas para hacer croquetas.
Un montón de ideas para disfrutar de ese manjar.
Es muy importante ablandar el pulpo antes de cocinarlo, he visto como lo hacían golpeándolo contra la piedra en la Isla de Ons.
Pero por suerte si lo congelamos el resultado es prácticamente el mismo.
Ayuda a que la carne quede más tierna.
Así que lo único que debemos hacer es congelarlo si lo hemos comprado fresco o comprarlo directamente congelado.