El vino que se bebe en el Vaticano procede de España, concretamente de las Bodegas Heras Cordón, en La Rioja.
El vino comercializado en exclusiva para la Santa Sede ya ha cautivado los paladares de Juan Pablo II, Benedicto XVI o Francisco I.
Además, para poder ser enviado, el nuncio tiene que desplazarse hasta las bodegas para dar el visto bueno al vino, y es entonces cuando se envían unas 2.000 botellas hasta la Santa Sede.
Para conseguirlo el antiguo propietario se reunió en una audiencia privada con el Papa Juan Pablo II, y desde el año 2003 es el proveedor oficial del vino en el Vaticano.
Así, para conseguirlo el antiguo propietario se reunió en una audiencia privada con el Papa Juan Pablo II, y desde el año 2003 es el proveedor oficial del vino en el Vaticano.
Además, sus características lo convierten en un vino ideal para los eventos oficiales, como es la celebración del Cónclave, que es el vino que se bebe.
La bodega empezó a exportar el vino en exclusiva en el año 2003.
Desde hace más de 150 años la Bodega Muller, en Reus, lleva sus botellas hasta las puertas del Vaticano y actualmente es proveedor histórico.
Como dato curioso, su Vino de Misa, con seis escudos papales por la trayectoria histórica que tiene, ha de seguir estrictamente las normatuvas canónicas: el vino ha de ser puro y sin aditivos artificiales.
Los Papas beben vino español desde hace décadas.