La eterna discusión es cual es la mejor elección, si la tortilla de patatas con cebolla o sin cebolla, hoy vamos a preparar la versión con cebolla y con un truco genial que te voy a dar para que quede jugosa y nada seca.
La tortilla de patatas teóricamente no lleva cebolla, eso dice su receta original, pero debemos de saber que las cosas van evolucionando y si la mayoría la tomamos con cebolla es porque la receta ha evolucionado y ese dulzor que le da la cebolla nos encanta.
Un truco que te voy a dar para conseguir la tortilla perfecta es cocinar los ingredientes por separado, es decir, la cebolla por un lado y las patatas pochadas por otro.
Además de este plato que es típico como aperitivo yo lo acompañaría de una buena ensalada mixta, una ensaladilla rusa, unos boquerones en vinagre o una croquetas de pollo.
Un set de recetas perfecta para cubrir todo el espectro de gastronomía española.
Usa siempre los mejores ingredientes, patatas nuevas y unas buenas cebollas.
Eso si, siempre pochado todo en un buen aceite de oliva.
Siempre vamos a usar una proporción de un huevo y una patata grande por personas.
Un truco es hacerlo con una cuchara porque se bate porque no le metes aire como si lo hicieras con un tenedor.
Un truco que me enseñaron es, antes de mezclar la patata y el huevo, dorar la patata a fuego fuerte en una sartén.
Es decir, agregamos en esa misma sartén sin aceite la patata para que algunas de ellas se doren y le den un toque genial.
Ahora mezclamos todo, rectificamos de sal y dejamos reposar unos 5 minutos que se mezcle todo bien.
Cuajamos en una sartén antiadherente por ambos lados unos 45 segundos.
El tiempo dependerá de lo cuajada que quieras la tortilla.
Si te gusta blandita, con esos segundos te valdrá.