La harina es un ingrediente fundamental en la cocina que se utiliza para una gran variedad de preparaciones, desde panes y pasteles hasta salsas y rebozados. La harina se puede clasificar de diversas maneras, y una de las más comunes es según el origen. La harina de trigo es la más común y versátil, y dependiendo de su contenido de gluten, hay varios tipos de harina de trigo. La harina de todo uso es ideal para una amplia gama de recetas, desde panes hasta repostería, es el tipo de harina perfecta para hacer croquetas. La harina de fuerza es con un alto contenido de gluten, es el tipo de harina perfecta para hacer pan y masas que requieren estructura. La harina de repostería es menos gluten que la harina de fuerza, ideal para pasteles y galletas. La harina integral contiene todo el grano, incluyendo el salvado y el germen, lo que la hace más nutritiva. La elección de la harina adecuada es fundamental para lograr los mejores resultados en la cocina. Cada tipo de harina tiene su propio uso y aporta características únicas a tus platos.