La historia de La Paella de Su comienza con Su, interiorista de profesión y valenciana de corazón, que al dejar su tierra empezó a cocinar paellas valencianas en las reuniones con amigos en Sitges.
Cada domingo, entre risas, socarrat y buena compañía, Su ponía en marcha los fogones como quien abre el alma.
Lo que empezó como una forma de mantener vivas sus raíces, pronto se convirtió en algo más.
La pasión por la auténtica paella valenciana creció hasta convertirse en un restaurante, impulsado por el cariño de quienes probaron aquellos arroces y sintieron que, por unas horas, estaban comiendo en casa.
Hoy, en el corazón de Barcelona, cerca de La Pedrera, Casa Battló, en pleno Eixample seguimos cocinando paellas tradicionales con ese mismo espíritu.
Detrás del proyecto está una familia: Su y Santi, al frente de la experiencia; Iván, su hijo, en la sala; y Ruth, al mando de los fogones.
Todos unidos por una idea simple pero poderosa: recuperar el sabor de lo auténtico y tradicional mediterráneo y compartirlo con quien se siente a la mesa.
Nuestra cocina es abierta, porque no tenemos nada que esconder.
Queremos que veas cómo se hace cada paella, que huelas el caldo mientras hierve, que oigas cómo chispea el socarrat al final.
Es parte del ritual.