La temperatura puede alterar mucho el sabor del vino, de hecho es uno de los factores más importantes a la hora de servir un vino y poder disfrutar de éste.
Por ello, es de vital importancia servir el vino a la temperatura adecuada dada su enorme importancia para un óptimo consumo.
1. Calcula el tiempo.
Cada vino requiere que se sirva a una temperatura adecuada y hay que prever el tiempo necesario para que se enfríe, si está demasiado caliente, o se temple, si está demasiado frío.
Hay que dejar que el vino se tome su tiempo.
Nunca es conveniente sacar la botella de la bodega para ponerla directamente en la mesa.
Tampoco es conveniente comprar una botella y abrirla en el mismo día.
El vino necesita algún tiempo para adaptarse a los cambios de temperatura, luz y ambiente.
Por tanto, hay que preparar las botellas que piensa beber, si puede ser con unos días de anticipación, y dejar la botella, en posición vertical y en la habitación donde se beberá, para que se adapte a su nuevo entorno.
2. Evita el vino "muy frío".
Si la temperatura de servicio es muy baja, el vino pierde muchos aromas porque los componentes volátiles no se liberan.
Un vino muy frío será un vino con escaso sabor.
La ventaja del frío es que ayuda a suavizar la acidez en los blancos, por ello se sirven ligeramente fríos, ayudando a suavizar un poco esta acidez pero sin llegar a tapar el sabor frutal.
3. Evita el vino "del tiempo".
Si la temperatura ambiente es muy alta (20ºC, o más), se acentúa la acidez y el alcohol, que estropea el sabor del vino, tanto en nariz como en boca.
El vino a partir de los 12ºC potencia la volatilización de los componentes aromáticos del vino, por eso, un tinto que es menos ácido y tiene una mayor complejidad aromática secundaria y terciaria, se sirve no tan frío para que se expresen sus aromas, pero sin llegar a un calor que acentúe demasiado su mayor grado alcohólico y haga perder su sabor.
El vino tinto debe enfriarse hasta los 12 a 18ºC como máximo, en función del tipo de vino.
En la actualidad vivimos en espacios cálidos o climatizados, y servir el vino tinto "del tiempo" a 20ºC es un error.