La fritura es fuente de alegrías y gozos, pero también de miedos y reparos.
La croqueta representa esa dualidad a la perfección; cada vez se hacen menos croquetas desde cero, pero ninguna precocinada, horneada o hecha en la airfryer superará a las croquetas caseras de siempre.
Arguiñano es firme defensor de esta joya de nuestra gastronomía y nunca se cansa de darnos sus trucos y consejos para que salgan perfectas.
Si se te rompen, es porque no le haces caso.
El televisivo cocinero tuvo una idea improvisada en uno de sus programas tras cocinar rabo de toro, sugiriendo que usáramos las sobras en unas empanadillas.
Semanas después vuelve al que es uno de sus platos fetiche para convertirlo en el relleno de unas croquetas de rabo de toro, enseñando a preparar primero el guiso antes de dar forma a las mismas.
Guía práctica para preparar unas croquetas de 10 y no volver a comprarlas hechas @karguinano
Más allá de la receta en sí, podemos quedarnos con la parte final del programa que también ha destacado en sus redes sociales, el secreto para freírlas sin que se rompan o se abran, técnica que se aplica a cualquier croqueta que preparemos en casa.
Y es sencillo: aceite abundante que cubra las croquetas durante la fritura a una temperatura constante.
No hay que escatimar en llenar de aceite la sartén o freidora, pero tampoco hace falta un barreño.
En el vídeo podemos ver a Arguiñano echar varias croquetas en una sartén no demasiado grande, sin sobrecargarla, para menear la misma durante la fritura, de tal modo que el aceite las cubre en todo momento.