Sabemos que los calamares viven en el mar y están distribuidos por casi todo el mundo, pero lo que tal vez desconocemos es en qué regiones son más observadas sus poblaciones y las profundidades que pueden llegar a alcanzar.
Algunos se mantienen solitarios debido a que permanecen en aguas muy profundas y oscuras, mientras otros conviven con cientos de animales marinos, e incluso son presas de especies terrestres y aéreas, como pinnípedos y aves.
Nototodarus hawaiiensis es una especie que se encuentra en las aguas de la plataforma continental de Australia y de las islas tropicales y subtropicales del Indo-Pacífico, como Hawái y las islas Midway.
Realiza migraciones verticales donde se les puede encontrar a profundidades entre 200 y 700 m.
Gonatus californiensis no tiene un rango muy amplio, pues se localiza en el Pacífico Oriental centrándose en las aguas de California, apareciendo rara vez en aguas hawaianas.
Estados Unidos de Norte América y México también cuentan con la presencia de Histioteuthis heteropsis, Illex oxygonius, e Histioteuthis corona en sus aguas, solo por mencionar algunos ejemplos.
Abralia veranyi se encuentra a profundidades de 700 a 800 m durante el día, pero sus migraciones verticales hacen que por las noches estén a tan solo de 20 a 60 m de profundidad.
El mar Mediterráneo también es sitio ideal para la reproducción de la especie Histioteuthis reversa, que también se distribuye ampliamente por el Atlántico norte muy cerca de Irlanda y Atlántico sur, ocupando mares de Namibia y Sudáfrica.
Los miembros juveniles de este calamar se encuentran desde la superficie marina hasta 200 m de profundidad; los adultos inmaduros entre los 80 y 300 m, y los adultos maduros llegan a distancias extremas entre 600 y 1,300 m de profundidad.
Tailandia, Reino Unido, Israel, Venezuela, Taiwán, Indonesia, Pakistán, Haití, Costa Rica, entre muchos otros países, cuentan con varias especies de calamar en los mares que los rodean, por lo que podemos deducir que los calamares se encuentran en casi cualquier parte del mundo y que las características de su anatomía les permiten a muchos de ellos, permanecer tanto en aguas frías como en aguas cálidas.